Carta Fe Política Apostólica ¡Muerte y Resurrección!

                                       COROLARIO DEL MANUAL DE CONDUCCIÓN SUPERIOR

Porque queremos justicia, una justicia más amplia, perfecta y eterna que se amalgama en la vuelta, el regreso al Paraíso, la Casa del Padre. Para que sea completa realizamos la unión de los tres cielos en uno.

¡Es el triunfo materializado de Jesús en la Cruz! Es el nuevo sacrificio de Jesús en la Cruz, en unos pocos que recuerdan el Camino. Lo marcamos, lo trazamos mostrando aún más encarnada Su Misericordia en nosotros pecadores.

Se compadece, asume-asumimos la debilidad del hombre para llevarlos-llevarnos a la Verdad Original.

Nuestra muerte y Resurrección es la muestra del Poder del Amor Joaquín Jesús en nosotros.

En estos tiempos donde la verdad de Satán en cada uno se manifiesta, lo abarcamos así muriendo por él para que recobre su semejanza, y así también la Creación toda, los ángeles caídos, el hombre y la naturaleza vuelvan-volvamos a la Verdad Original.

Así es y será porque a pesar del miedo y los impedimentos, su espíritu nos empuja con un fuego arrollador, la fuerza de Joaquín, el Poder del Amor.

La decisión es irrevocable, es paso a paso, momento a momento, donde recreamos junto al Padre la Gloriosa Pasión y Resurrección ahora en los más débiles y miserables.

¡Bendito sea el paso-la muerte, que nos permite encontrarnos cara a cara con Jesús y el Uno, abriendo nuevamente las puertas del cielo! ¡Bendito sea Dios que nos permite compartir la suerte de Su Hijo! ¡Bendita sea la Resurrección que nos permite volver a la tierra para conducir a nuestros hermanos e hijos!

Y además de todo esto porque quiero, porque desde pibe sueño morir por Jesús, sueño y quiero su Reino entre nosotros.

Tadeo Zadquiel-Martha Eva Matatiel y Paz María Mercedes, Belén Victoria - Ministro de Salud, Apóstol Coordinador de Cristo Rey

Quien lea esta Carta con alma y corazón, confianza y entrega, podrá vencer la contradicción, encontrará la fuerza en Diossí mismo, si así lo quiere, lo siente y se anima y cree.

Podrá contemplar que todo es Amor, y en todo, al Amor que es Dios con la certeza plena que el Paraíso está aquí, cerca, al alcance de la mano de cualquier mortal.

«Estos son Los Ojos de Dios, y quiero que los tengan cada uno de Mis hijos.» _dice el Señor Dios Padre Creador

¡Ahora podemos tenerlo Todo, porque sólo lo tenemos a Él!

Cada uno te decimos, y unidos en los espíritus, todos juntos:

¡Aquí estoy Señor, para hacer tu Voluntad!

 

Dada en San Nicolás de María, ¡La Santa y Nueva Argentina!, desde Su Casita, el 25 de marzo de 2011, día de la Anunciación de Gabriel a María de Nazaret. El más grande acto de Fe de todos los tiempos, de Aquella humilde doncella predilectísima de Dios Padre.

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